El 2020 está siendo sin duda un año muy diferente y extraño para todos nosotros. Marcados por la pandemia del Covid 19, hemos tenido que acostumbrarnos a una nueva normalidad que, sin lugar a dudas, es peor que la normalidad anterior, porque todavía tenemos muchas restricciones encima con el objetivo de parar el virus. Las noticias que llegan en los últimos días sobre las vacunas son muy alentadoras, pero hasta que consigamos la inmunidad de la mayoría de la población, la situación va a cambiar más bien poco, porque ya hemos comprobado este verano que no podemos confiarnos en absoluto con un virus que siempre vuelve. Las restricciones actuales parecen dar resultado, pero se acerca un momento muy especial del año y seguramente la situación cambie y se relaje.
Las fiestas navideñas van a ser muy diferentes este año, y eso es algo que debemos tener en cuenta desde ya. Seguramente ya lo habrás imaginado, por como ha ido el resto del 2020 y por las restricciones que todavía sufrimos, pero ahora es cuando el Gobierno está empezando a mostrar cuál es su plan para estas navidades. Las fiestas familiares por antonomasia se acercan, y hay que tomar decisiones importantes, entre la responsabilidad y la empatía con los que llevan mucho tiempo sin reunirse en familia. Es por eso que el Gobierno ya ha presentado un borrador de su plan, que ahora negocia con las comunidades, para intentar que las Navidades sean lo más felices posibles dentro de esta situación, sin perder de vista las precauciones que debemos tomar para evitar que el virus vuelva a expandirse de nuevo.
Una época marcada por la pandemia
Hablar de navidades cuando todavía estamos en noviembre puede ser algo un poco exagerado, pero no hay duda de que cada año las fiestas se adelantan más. Hay adornos por las calles, anuncios de juguetes y turrón en la televisión… La navidad está al caer y este año será muy diferente, sin duda, porque estará marcada por el Covid 19. La segunda hora de esta pandemia está alargándose bastante en nuestro país, donde hay territorios que están sufriendo incluso más que en la primera ola de primavera. Es por eso que las restricciones, como el toque de queda o la limitación de horarios comerciales, siguen presentes en nuestro día a día. En un ambiente así, ¿cómo vamos a poder celebrar la Navidad? Está claro que adaptándonos como podamos, porque las fiestas este año van a ser muy distintas.
Medidas y restricciones
Desde hace casi un mes, las medidas y restricciones para luchar contra la pandemia están en manos de las comunidades autónomas, aunque el Gobierno Central ha impuesto algunas que son de obligado cumplimiento. Por ejemplo, la distancia de seguridad de dos metros se mantiene, así como el uso obligatorio de la mascarilla incluso al aire libre. Las reuniones no pueden ser de más de seis personas, y habrá un toque de queda que se extenderá durante la madrugada, pudiendo cada comunidad elegir el horario que prefiera. En algunas, por ejemplo, el toque de queda está desde las 22 a las 7 horas. Sin embargo, de cara a las fiestas, aprece que el Gobierno va a admitir mayor flexibilidad en este sentido, ya que se apunta a que el toque de queda empezará a la una de la madrugada, para permitir ciertas reuniones familiares, eso sí, de no más de seis personas.
Ni cabalgatas ni villancicos
Los eventos masivos que hemos presenciado otros años, desde el encendido de luces hasta cabalgatas, desparecerán por completo durante estas fiestas. Es obvio que no se puede realizar un acto que reúne a miles de personas en un mismo lugar, por el peligro que eso supondría para la salud, para la expansión del virus nuevamente. Lo que resulta curioso es que tampoco se permitirá el canto de villancicos en plazas o puerta a puerta, ya que se ha comprobado que al cantar, como al gritar, corremos más peligro de propagar el virus con nuestra propia saliva, aun de manera inconsciente. Los villancicos tendrán que ser en casa, este año al menos, en la compañía familiar.
La propuesta de ‘Salvar la Navidad’
Estamos a un mes de llegar a la primera fiesta importante, Nochebuena, y desde el Gobierno han querido lanzar una propuesta para sensibilizar aun más a la población, con la necesidad de estar durante este mes guardando todas las restricciones y evitando la propagación del virus a través de las recomendaciones habituales, como quedarse en casa, lavarse bien las manos y contar siempre con la distancia y la mascarilla. El descenso de infectados, hospitalizados y fallecidos puede traer consigo unas restricciones algo menos fuertes, como las cenas de Navidad y Nochevieja con seis personas, con toque de queda a la una y con barres abiertos durante toda la tarde, aunque también será decisión de las autonomías, como lo es actualmente.
Restricciones en Canarias
Ciñéndonos a nuestra comunidad, podemos sentirnos aliviados de que, aunque la situación debe ser muy tenido en cuenta, no estamos a ese nivel tan preocupante que se vive en la península. Las restricciones que el Gobierno autonómico ha decidido tomar son mucho más flexibles, estando el cierre de los bares y terrazas a las 23 horas, aunque el aforo de los mismos se ha reducido al 50%. Las reuniones tampoco pueden superar las seis personas, y los actos deportivos, litúrgicos y culturales se han limitado en su aforo. La incidencia del virus en la región todavía sigue siendo mínima, sobre todo comparada a la que están sufriendo en otras partes del país. Sin embargo, el gobierno autonómico sabe que más vale prevenir que curar, y ha endurecido un poco las restricciones con respecto a meses anteriores, buscando también una mayor confianza de cara a las fiestas navideñas.